La inspiración es lo opuesto a la fatiga.
Estar fatigado es estar des-animado, mas estar inspirado es estar en el espíritu.
Los verdaderamente inspirados están iluminados y no pueden mirar en las tinieblas.
Se te pide que vivas de tal forma que demuestres que no eres un ego.
El ego en sí es una contradicción. Tu falso ser y el ser de Dios están en oposición. Y lo están con respecto a sus orígenes, rumbos y desenlaces. Son fundamentalmente irreconciliables porque el espíritu no puede percibir y el ego no puede gozar de conocimiento. No están por lo tanto en comunicación ni jamás lo podrán estar.
Nadie puede llegar al espíritu desde el ego.
La iluminación es el fin del dominio del ego y la curación de la mente.

La sesión concluye con una meditación guiada de sanación.

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